top of page
Ancla 6

Unidad 4: Los paisajes naturales y las interacciones naturaleza-sociedad

Yo nací y me crie en una ciudad industrial bastante mugrienta situada en el norte de Inglaterra. Desde muy pequeño, me encantaba escaparme en bicicleta o a pie para buscar los paisajes rurales y limpios del campo cercano. Esto fue alimentando en mi interior el amor por la naturaleza, además de un creciente deseo por comprender los paisajes que veía y visitaba.

David Robinson: Cómo leer paisajes (2017)

Ancla 1

1. Los paisajes naturales.

​

1.1 El paisaje geográfico.

​

Puede ser de tres tipos:

  • Paisaje natural: su aspecto depende de la interacción de elementos naturales: relieve, vegetación, clima, aguas y suelo.

  • Paisaje humanizado: su aspecto natural ha sido transformado por el hombre con finalidad poblacional, económica u otra. Son los paisajes urbanos, agrícolas, ganaderos, mineros, industriales, turísticos, etc.

  • Paisajes mixtos: combinan elementos de los dos anteriores. Son muy comunes.

​

​

1.2 Diversidad de paisajes naturales en España.

​

  • Paisaje oceánico:

    • Zona: cornisa cantábrica y Galicia.​

    • Relieve: montañoso y con pocas llanuras.

    • Clima: oceánico.

    • Aguas: ríos de la vertiente cantábrica. Cortos y caudalosos.

    • Vegetación: bosque caducifolio, landa y prado.

  • Paisaje mediterráneo:​

    • Zona: Casi toda la Península que no corresponda al clima oceánico ni de montaña. Islas Baleares, Ceuta y Melilla.​

    • Relieve: Cordilleras y cuencas sedimentarias, como se ha visto en anteriores temas. Cordilleras que rodean a la meseta e interiores.

    • Clima: mediterráneo.

    • Aguas: ríos de la vertiente atlántica: largos y caudalosos, transcurren por grandes depresiones. Ríos de la vertiente mediterránea: cortos y poco caudalosos por nacer en montañas cercanas al mar. La excepción es el Ebro. Lagos de todo tipo. 

    • Vegetación: bosque perennifolio, maquia y garriga. Estepa donde el suelo es muy pobre y seco.

  • Paisaje de montaña:​

    • Zona: por encima de los 1000 m de altitud.​

    • Relieve: fuertes pendientes.

    • Clima: de montaña.

    • Aguas: ríos de regímenes nivales, nivo-pluviales o pluvio-nivales. Lagos glaciares.

    • Vegetación: según pisos de vegetación como vimos cuando estudiamos y practicamos con cliseries.

  • Paisaje canario:​

    • Zona: Islas Canarias.​

    • Relieve: volcánico.

    • Clima: subtropical canario: en zonas bajas, estepario o desértico; en zonas medias, en vertiente de umbría, clima casi tropical húmedo.

    • Aguas: muy escasas. Ausencia de ríos, solo hay torrentes y arroyos. Predominio de acuíferos. 

    • Vegetación: muy rica, con endemismos y reliquias. 

2. Influencia del medio en la actividad humana.

​

2.1 Según elementos naturales:

  • El relieve:

    • Poblamiento: preferencia por zonas llanas y cercanas a la costa. Zonas altas por pastos y aprovechamiento de bosques.​

    • Agricultura: las zonas llanas se cultivan con mayor facilidad.

    • Proporciona recursos minerales y energéticos.

    • Hace difícil el transporte. Construcción de túneles y puentes.

    • Atractivo turístico, sobre todo por el auge del turismo rural.

    • En la costa, afecta a la construcción de puertos, aunque puede atraer el turismo.

  • El clima:​

    • Poblamiento: se evitan los que son muy fríos o demasiado áridos.  ​

    • Agricultura: se adapta a las condiciones climáticas, salvo al clima desértico o de alta montaña. 

    • Aporta fuentes de energía renovables y limpias, como la solar, la hidroeléctrica, la eólica o la mareomotriz.

    • Afecta al transporte, sobre todo si hay heladas, altas precipitaciones o niebla.

    • Atrae al turismo en zonas de sol y playa.

  • El agua:

    • Su fuente principal de procedencia son las precipitaciones. 

    • Su uso puede ser consuntivo y no consuntivo.

      • Consuntivo: regadío (más del 80% del total), consumo humano y municipal (parques y jardines, etc.)

      • No consuntivo: pesca, piscifactorías, producción hidroeléctrica, navegación y deportes náuticos. 

    • El balance hídrico: es el porcentaje de agua del que se dispone, restado del total recibido por la precipitación. En España, debido a la alta evaporación, solo se dispone del 32% del agua aportado por la precipitación. 

    • Problemas: 

      • Desequilibrio entre agua disponible y demanda: las precipitaciones están muy desigualmente distribuidas en España, y la demanda es muy alta en grandes ciudades, zonas industriales y turísticas. Por ejemplo, la demanda de agua en las zonas turísticas del Mediterráneo es muy superior al disponible, mientras que en el área cantábrica, hay excedente de agua. ​

      • Pérdidas de agua: se pierden grandes cantidades por usos deficientes de sistemas de riego y por fugas en conducciones. 

      • Cambio climático: se calcula que, para 2060, los recursos hídricos podrían descender hasta un 22%.

    • Obras hidráulicas:​​

      • En aguas superficiales:

        • Embalses (hay más 1300, se utilizan para abastecimiento urbano e industrial, regadíos, producción de electricidad​, regulación del caudal para evitar inundaciones o usos recreativos. Son caros y provocan impactos sociales y medioambientales). Los mayores embalses son los de las cuencas del Ebro, Duero, Tajo, Guadiana y Guadalquivir. 

        • Conducciones: hay unos 15 000 km.

        • Trasvases: consiste en trasladar agua desde cuencas excedentarias hasta las deficitarias. El más conocido es el trasvase Tajo-Segura, fuente de polémicas por parte de los afectados.

      • En acuíferos: pozos y galerías para uso agrícola, industrial y urbano, sobre todo en el sur, Baleares y Canarias.  

      • Plantas desalinizadoras. El principal problema es su alto coste y consumo energético.

      • Estaciones de regeneración de aguas residuales (ERAR) para riego agrícola y urbano, industria y recarga de acuíferos.

      • Plantas potabilizadoras.

      • Plantas depuradoras: tratan aguas residuales para evitar que contaminen.

  • La vegetación: ​

    • Crea empleo en el medio rural.​

    • Proporciona recursos alimenticios, materias primas y fuentes de energía.

    • Protege el medio ambiente: disminuye la contaminación (absorción de CO²), hace de pantalla contra el ruido, evita la erosión excesiva, mantiene la sombra, evitando así la excesiva evaporación y reduce el riesgo de inundaciones. 

  • El suelo:

    • Poblamiento: preferencia por suelos fértiles en lugares llanos. Las casas de las zonas montañosas usan la piedra, y las de las zonas arcillosas, el adobe. ​

    • La producción agraria: depende, en gran medida, de los suelos. En España, en general, es mediocre. 

    • Las infraestructuras: el problema de los suelos arcillosos es la tendencia al deslizamiento, y el de los suelos calizos, su tendencia a los socavones y hoyos de origen kárstico.

​

​

2.2 Según los riesgos naturales:

​

  • De tipo geológico:

    • Seísmos: zona de riesgo por el contacto entre las placas euroasiática y africana. Por eso, el área de Murcia y Granada es uno de los más peligrosos. También hay seísmos en la zona pirenaica, pues estas montañas aún están formándose. ​

    • Erupciones volcánicas: Son un riesgo en las islas más jóvenes de las Canarias, como La Palma, Hierro o Tenerife.

    • Movimientos de ladera: se dan, sobre todo, en el valle del Guadalquivir, cuyos sedimentos aún están asentándose, y en las grandes cordilleras. Se evitan mediante obras de drenaje y plantación de árboles.  Son de dos tipos: deslizamiento de suelos en zonas húmedas y desprendimiento de rocas por diaclasado.

  • De tipo climático:​

    • Inundaciones: afectan, sobre todo, a las vertientes cantábrica y mediterránea, ya que la montaña está muy cerca de la costa y el agua cae muy rápido. España posee planes de prevención y emergencia para inundaciones.​

    • Sequías: se producen cuando en una región llueve menos de lo esperado. Es decir, los veranos mediterráneos no son de sequía, pues se espera que llueva poco, pero si no lloviese tampoco en otoño, sí que se produciría una situación de sequía. Para hacerles frente, en España existe el Observatorio Nacional de la Sequía (ONS).

    • Otros: granizo, tormentas eléctricas, olas de frío, temporales de nieve, etc.

Ancla 2

3. Influencia de la actividad humana sobre el medio

​

Los problemas causados por la acción antrópica sobre el medio ambiente son varios y de profundo alcance:

  • Sobreexplotación o explotación de los recursos naturales por encima de las posibilidades del medio.

  • Contaminación que el medio no es capaz de asimilar.

  • Destrucción de elementos medioambientales.

​

​

3.1 Alteración del relieve

​

Las causas son, entre otras:

  • Construcción de minas.

  • Construcción de canteras.

  • Construcción de infraestructuras de transporte: vías de tren, carreteras, túneles, viaductos y puentes, etc.

Los impactos, entre otros:

  • Daño medioambiental.

  • Impacto visual.

  • Resto del valor económico del lugar.

​

Las soluciones pueden ser:

  • Restauración o regeneración del espacio afectado, como en el caso de las vías verdes, o la creación de geoparques, donde se intenta conservar el patrimonio geológico y llevar una actividad económica sostenible.

​

​

3.2 Contaminación atmosférica

​

La causa es la emisión de productos o gases tóxicos a la atmósfera, tales como el monóxido de carbono (CO), dióxido de carbono (CO2), dióxido de azufre (SO2),óxido de nitrógeno (NOx), cloro (Cl2) o partículas de polvo y humo.

​

Fenómenos que ocasionan contaminación atmosférica:

  • La lluvia ácida: el SOâ‚‚ y en NOx se mezclan con vapor de agua y se convierten en ácido sulfúrico (Hâ‚‚SOâ‚„) y ácido nítrico (HNO₃). Al ascender y condensar, acaba precipitando lluvia con más acidez de la normal. Este tipo de contaminación lo provocan, sobre todo, las centrales térmicas y afecta a la vegetación, a las aguas e incluso a las construcciones. 

  • El ozono: El problema aquí es doble: el de la capa de ozono y el del ozono a ras de suelo. En cuanto al primero, en la estratosfera hay una capa de ozono (O₃) que protege a los seres vivos del exceso de radiación ultravioleta y que perdió mucho espesor a finales del siglo pasado, hasta el punto de "agujerearse", especialmente sobre la Antártida. En los últimos años, esta situación se ha revertido gracias a la firma del Protocolo de Montreal en 1987, en el que casi todos los países del mundo se comprometieron a frenar las emisiones de cloro contenido en los clorofluorocarburos empleados en aerosoles, espumas y refrigerantes. En cuanto al segundo, procedente de la combustión de hidrocarburos (butano, metano, gasolina, petróleo, queroseno, etc., en automóviles, industria y calderas de carbón) afecta a todos los seres vivos, por eso, su uso trata de restringirse y vigilarse en observatorios como el que se muestra en esta web.

  • La campana de contaminación urbana: popularmente conocida como "boina", es una niebla de partículas en suspensión de humo y polvo que provoca el tráfico y la calefacción, sobre todo en verano en las grandes ciudades. Se combate moderando el uso del transporte privado y de las calefacciones.

  • El efecto invernadero: este fenómeno consiste en que el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) o el óxido nitroso (N2O), presentes en la atmósfera se vuelven tan abundantes que envuelven la Tierra, dejando pasar la radiación solar, pero reteniéndola cerca de la superficie, es decir, igual que un invernadero. Si bien cierto efecto invernadero es necesario para la vida en la Tierra (si no, el planeta sería demasiado frío), en exceso aumenta la temperatura (calentamiento global), siendo esto peligroso para todos los seres vivos. Las consecuencias del calentamiento global son: la elevación del nivel del mar, que traerá reducción de playas y costas bajas, como el Mar Menor, el parque natural de Doñana o el delta del Ebro; la reducción de las precipitaciones, el aumento de inundaciones y de sequías, la reducción de bosques y de la biodiversidad, y el aumento de plagas y especies invasoras. La solución pasa por que todos los gobiernos del mundo se comprometan a reducir la emisión de estos gases. Para lograr este objetivo se firmaron el Protocolo de Kioto (1997) o el Acuerdo de París de 2015.

​

​

3.3 Contaminación acústica 

​

Las causas son: el tráfico, algunas actividades industriales, obras y algunas actividades de ocio como salas de conciertos o bares y discotecas. El volumen considerado tolerable por el oído humano sin que su salud sufra es de 55 dB, según la OMS. 

Las consecuencias son: dolores de cabeza, ansiedad, insomnio, sordera o hipertensión.

La solución es, simplemente, bajar el nivel de ruido: moderar la circulación de vehículos, los ruidos, especialmente los nocturnos; o la instalación de pantallas acústicas, como las presentes en los laterales de algunas autopistas. La UE elaboró la Ley del Ruido en 2003 para luchar contra la contaminación acústica. 

​

​

3.4 Contaminación lumínica

​

La causa es el exceso de iluminación en algunas ciudades por la noche. 

Las consecuencias son: daños al ecosistema nocturno (sobre todo, aves nocturnas), gasto energético innecesario, dificultades para los aviones.

La solución pasa por reducir la iluminación nocturna. 

​

​

3.5 Alteración, sobreexplotación y contaminación de las aguas.

​

  • Alteración morfológica del cauce de los ríos: se produce para la extracción de áridos (pequeños fragmentos rocosos para utilizarlos en la construcción), acumulación de sedimentos, vertido de residuos y basuras y, por supuesto, la urbanización. Las consecuencias son la pérdida de biodiversidad y el aumento de la erosión fluvial y de las posibilidades de inundación. La solución es la reforestación del bosque de ribera y la limpieza de los cauces.

  • Alteración morfológica de humedales: se produce por acumulación de sedimentos, escombros o basura, lo que altera el ecosistema y el posible aprovechamiento del agua. La solución es su limpieza y cuidado.  

  • Contaminación de las aguas:

    • Las causas son la evacuación excesiva de desechos, que impide su oxigenación y su regeneración natural. Estos desechos proceden de fertilizantes y purines del sector primario, de los vertidos tóxicos del secundario, de las aguas fecales y desechos de las ciudades​, o de ocasionales mareas negras

    • Los acuíferos más contaminados se hallan en las cuencas de los ríos Guadiana, Guadalquivir o Júcar. 

    • La solución está en vigilar los vertidos y la creación de Áreas Marinas Protegidas. 

​

​

3.6) Daños, alteraciones y deforestación en la vegetación:

​

  • Los daños tienen dos causas: 

    • Naturales: altas temperaturas, sequías o plagas.​

    • Antrópicas: contaminación atmosférica. Los efectos son la defoliación y la decoloración.​​

  • La alteración está causada por la sustitución de unas especies por otras que sean más rentables económicamente, luego, es un factor antrópico. Un ejemplo es la reforestación llevada a cabo en la región eurosiberiana con eucaliptos y pinos, muy polémica, porque estos árboles arden muy rápido en caso de incendio.​

  • La deforestación es la destrucción de la vegetación.

    • Cusas: tala e incendios forestales, comunes en verano. ​

    • Consecuencias: aumento de emisiones de CO2, erosión del suelo, muerte de la biodiversidad, pérdida del valor estético del paisaje. Todo esto puede acarrear, además, pérdidas económicas y necesidad de migraciones humanas.

    • Solución: en 2002, se puso en marcha el Plan Forestal Español, un proyecto a 30 años (2002-2032) que trata de combinar la explotación económica responsable del bosque con su cuidado y su uso recreativo adecuado.

​

​

3.7) La artificializacion, la contaminación, la erosión y la desertificación del suelo.

​

La artificialización consiste en la desaparición del suelo original por causa de la urbanización.

​

La contaminación del suelo se debe a la minería, a los vertidos industriales y urbanos y al empleo abusivo de productos químicos en la agricultura. La consecuencia es que el suelo se vuelve tóxico e inaprovechable para la agricultura, y la solución pasa porque la empresa que contamine se encargue de reparar el suelo. Es el principio llamado "quien contamina paga", establecido en todos los países de la UE. 

​

La erosión puede deberse a causas naturales y antrópicas.

  • Naturales: la termoclastia, la gelifracción, el viento, la acción de los ríos (sobre todo en pendientes pronunciadas), las precipitaciones torrenciales (sobre todo donde hay escasez de cubierta vegetal), y la aridez son las formas de erosión natural más habituales.

  • Antrópicas: la deforestación (deja al suelo indefenso ante las precipitaciones), el no dejar las tierras en barbecho cuando lo necesitan, el pastoreo excesivo o el abuso de productos químicos. En España, los suelos que tienen más riesgo son los de la costa mediterránea, los del valle del Guadalquivir y los que estén en fuerte pendiente y tengan escasa cubierta vegetal.

​

La desertificación:

  • Causas: la erosión, la aridez, los incendios y la sobreexplotación del suelos agrícolas y de acuíferos. 

  • Consecuencias: mayor riesgo de inundación y de deslizamiento del suelo. Reducción de la biodiversidad y de la fertilidad agraria. 

  • Solución: rehabilitación de áreas desertizadas a través de iniciativas como el PAND (Programa de Acción Nacional contra la Desertización) o el Proyecto LUCDEME (Lucha Contra la Desertización en el Mediterráneo), ambos dependientes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

​

​

3.8) La producción de residuos.

​

Existen vertederos ilegales o incontrolados que ocasionan problemas de salud y contaminan el suelo, el agua y el aire (entre otras cosas, expulsan gases de efecto invernadero). Incluso los vertederos controlados tienen cierto impacto medioambiental. 

Solución:

  • Clausura y recuperación de vertederos incontrolados.

  • Disminuir la cantidad de productos que ocasionan residuos. Esta acción se puede sintetizar con las llamadas "Tres R": reducir, reutilizar, reciclar.

  • Si los residuos son no reciclables, utilizar el calor de su incineración para producir energía, y la materia orgánica para compost. 

 

​

3.9) Reducción de la biodiversidad.

​

  • Causas: alteración de los hábitats, urbanización y construcción de vías de transporte, introducción de especies invasoras tanto en la fauna como en la flora, selección genética en la agricultura y la ganadería, caza y pesca excesiva.

  • Especies en peligro: vegetales, tales como la siempreviva o la piña de mar; y animales, tales como el oso pardo, el lince ibérico, el águila imperial o el quebrantahuesos, entre muchas otras. 

  • Solución: el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico elaboró el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y Catálogo Español de Especies Amenazadas en 2011 para cuidar y recuperar estas especies. Esta lista se actualiza periódicamente. Además, se crean corredores ecológicos (caminos protegidos para que las especies puedan ir de un lugar a otro sin peligro) y se trata de evitar la proliferación de especies invasoras y la caza y pesca excesiva.  

Ancla 3

 Vertedero de Valdemingómez, Madrid 

4. Los espacios naturales protegidos.

​

En 2007, el gobierno de España promulgó la Ley del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, que estableció dos condiciones para que un paraje natural sea espacio protegido:

  1. Contener especies o elementos naturales representativos o amenazados.

  2. Que estos parajes estén dedicados a la conservación de la biodiversidad y los recursos naturales.

Estos espacios protegidos son:

  • Parques Naturales: ricos en biodiversidad, aprovechamiento de recursos y con la posibilidad de ser visitados. Algunos de los más relevantes son: Timanfaya (Lanzarote), Tablas de Daimiel (Ciudad Real), Doñana (Huelva, Sevilla y Cádiz), Picos de Europa (Asturias, León y Cantabria), Ordesa y Monte Perdido (Huesca).

  • Reservas naturales: muy similares a los parques naturales, pero más pequeñas. Están más localizadas y su función protectora se centra de forma más específica sobre algunas especies. 

  • Áreas Marinas Protegidas: en estas se limita la acción antrópica para proteger la biodiversidad y la riqueza geológica. La más relevante es la del Carducho, entre Asturias y Cantabria. 

  • Monumentos Naturales: formaciones tales como cuevas, cascadas, bosques o yacimientos paleontológicos que, por su interés y belleza, están protegidos.

  • Paisajes protegidos: cualquier zona que se considere que deba ser protegida por sus valores estéticos, naturales y culturales. 

​

Ancla 4
Ancla 5

TEST
Haz click aquí para realizar el test de la unidad

 Guía para comentar paisajes 

 Paisajes comentados 

bottom of page